15 julio 2010

Sueño ciento setenta y seis...

Escuchando: Hunting High And Low -Remastered- (A-Ha)



No es aquí, no es la estación, pero te evoco. Algunas mañanas de Domingo, de paso por el Café te observo. Estás sentado en una mesa, la misma mesa, tú mesa. Tus gafas, tú pluma, tus cuartillas amarillas (las de verdad) se llenan de garabatos que desde aquí me es imposible descifrar. Las incógnitas pasean por tú pelo blanco que huye hacia atrás, recorren todas esas arrugas que son jeroglíficos en tú cuerpo y que hablan de lugares remotos que seguro no conozco. Es complicado decidirse, ¿escribes?, ¿lees?, ¿piensas?, ¿todo o nada a la vez?. Es un pulso quieto, el impulso que necesitas para no moverte del sitio y estar en todas partes. Antes, ahora. Miras hacia la puerta acristalada, ves a la gente pasar con algo en los ojos, como queriéndolos atrapar con una caricia, como intentando apresar a un pájaro pequeño para que haga su nido en lo más oculto y tierno de ti… no te resignas, quieres que el tiempo pare, que toda tú nostalgia no salga volando y emigre hacia algún lugar lejos. ¿Me escribirás?, sin que lo sepas yo ya lo he hecho. Sin saberlo, como son las cosas que realmente importan.

http://www.youtube.com/watch?v=lf45KMHeFeQ

3 comentarios:

LUISELMODI dijo...

¿Todo tuyo? ¿Foto y Texto?

Javi dijo...

¿Lo dudas?

LUISELMODI dijo...

No, solo pienso que debes aplicarte a ti lo que me atribuyes a mí (en el arte de las palabras, of course...)